política

Aunque todo es política, no es un tema que me ponga. Así que he decidido que no es un tema sobre el que vaya a hablar.

Sin saber muy bien porqué, me siento obligado a justificar esta decisión.

Se supone que la política es la ciencia de solucionar problemas, pero en tiempos mercantilistas como el nuestro (2022), quien se dedica a la política ha detectado que la mejor forma de hacerse imprescindible es generar problemas. Cuanto más irresolubles, mejor, que así les aseguran la poltrona.

Es una batalla que me agota, así que prefiero enfocar mis energías en otros campos.

La política pertenece al bloque de «Ciencias Sociales» en la CDU (Clasificación Decimal Universal). Cuando la sociedad entra en crisis (krisis=cambio en griego, no olvidemos), todas sus ciencias pasan a estar en revisión.

Y a mí me gustan las certezas.

Que una política use la palabra política para descalificar la política descalifica más a esa política que a la política.

Jorge Rodriguez en twitter respondiendo a Anabel Alonso que responde “huelga debida a tus políticas” a Ayuso que dice que la huelga de médicos es una “huelga política”.

No quiero entender de política ni de ventas. Muchos recovecos que siento como peligrosos. Me acojo a la ciencia del bienestar: calma, plan y evaluación. Cada día, en examen y evaluación permanente.

Lo viejo es bello por inútil. Deja memoria de cómo fue su utilidad.

Scroll al inicio