nihil novum

Nihil novum sub sole. Nada nuevo bajo el sol.


Según el razonamiento de Luis Monge Malo, es materialmente imposible que no se haya dicho todo lo que se puede decir de todo a lo largo del billón de almas humanas que han pasado por la tierra en los últimos diez mil años, desde el Neolítico. Según mis cálculos no llegarían al billón, pero en cualquier caso sí son muchas almas.


Nihil novum sub sole” (nada nuevo bajo el sol) es un verso del Eclesiastés (capítulo 1, versículo 9), libro 21 de la Biblia compuesto de 12 capítulos, perteneciente al Antiguo Testamento, en la forma latina de la traducción de la Vulgata.


El Eclesiastés (Qohéleth en hebreo) también aparece en el Tanaj aunque en ubicación distinta.

El Tanaj o Mikrá son los 24 libros canónicos del judaismo y se dividen en tres partes: la Torá (ley), los Nevi’im (profetas) y los Ketuvim (escritos). El Antiguo Testamento añade a éstos siete libros, los Deuterocanónicos.
La Biblia es una colección de libros agrupados en tres partes:


-Pentateuco, Torá, (génesis, éxodo, levítico, números y deuteronomio).
-Profetas.
-Escritos. (Ketuvin). Salmos, proverbios, job, cantar de los cantares, rut, lamentaciones, eclesiastés, ester, daniel, esdras-nehemías, y crónicas I y II.

Los versículos 2 al 10 de Eclesiastés son:


2 Vanidad de vanidades, todo es vanidad.
3 ¿Qué ventaja saca el hombre de todas las penalidades que se dan bajo el sol?
4 Una generación va, otra viene, y la tierra jamás cambia.
5 El sol sale, el sol se pone; y vuelve pronto a su lugar para volver a salir.
6 Sopla el viento hacia el sur y gira hacia el norte; luego vuelve a girar, y no deja de girar.
7 Todos los ríos van al mar, y el mar nunca se llena; y vuelven los ríos a su origen para recorrer el mismo camino.
8 No hay nadie capaz de expresar cuánto aburren las cosas; nadie ve ni oye lo suficiente como para quedar satisfecho.
9 Lo que ha sucedido, vuelve a suceder; y lo que antes se ha hecho es lo que se hará. No hay nada nuevo bajo el sol.
10 Si hay alguien que dice: ¡Esto es algo nuevo!; esto ya existía siglos antes de nosotros.


rastro fragilidad: la fragilidad de Taleb, el nihil novum nada nuevo, y el Eclesiastés eclesiastés.

Scroll al inicio